No importa la hora, los médicos siempre estamos atentos y al pendiente para cuidar la salud de nuestros pequeños pacientes.
Cuando los pequeños se enferman siempre surge la urgencia para sanarlos, pues ante este tipo de situaciones y otras que también pueden ocurrir, nuestra recomendación es mantener un contacto con el médico tratante, para resolver cualquier duda que pudiera surgir.
Y es que como mamás y papás primerizos (y no tan primerizos), siempre existen dudas e incertidumbre para cuidar la salud de nuestros pequeños y, si bien generalmente contamos con el apoyo de nuestros círculos cercanos, definitivamente las recomendaciones de la abuelita; vecinos o amigos y sobre todo la automedicación no deben ser fomentadas, por lo contrario, lo mejor será seguir las recomendaciones de #LoQueDiceTuMédico al pie de la letra.
Para mantener el contacto con los médicos, existen diversas opciones como vía telefónica o videollamada, en los casos de que nuestros pequeños presenten síntomas leves como tos o dolor de pancita; sin embargo, aunque parezcan síntomas “leves” siempre deben mantener comunicación con el médico tratante, para darle seguimiento a su enfermedad, es decir, el médico le dirá cuando deberá llevar su hijo o hija al consultorio para revisarlo. En los casos más graves como: lesiones mayores, se debe buscar inmediatamente la consulta presencial para evitar los riesgos en los pequeños.
Durante la consulta, los médicos hacemos una valoración general, de acuerdo con la historia clínica del niño y sus características fisiológicas que hacen de su caso único. Una vez realizado el diagnóstico, los médicos prescribimos las recomendaciones, dieta, reposo y medicina en la receta, que es un documento oficial respaldado por nuestra firma y conocimiento para asegurar un tratamiento que permita sanar prontamente a los pequeños.
Cada caso es único y particular, por lo que la receta es un documento personalizado que solamente está designado para ayudar a mejorar la salud de cada persona, por ello el médico es el único que puede realizar ajustes y tomar decisiones junto contigo para definir una estrategia que ayude a mejorar el bienestar de tus pequeños.
En los casos específicos donde llegasen a presentarse enfermedades de las llamadas “crónicas”, en las que el tratamiento para su control deberá mantenerse de manera permanente, lo ideal es preguntar al médico acerca de las diversas opciones de programas de apoyo a pacientes, que facilitan con descuentos y otros esquemas el apego para que tus pequeños puedan mantener calidad de vida.
Y para las personas que aún no cuentan con un médico familiar o de cabecera, te invito a que contactes a las asociaciones que formamos parte del movimiento #LoQueDiceTuMédico, para encontrar a un especialista cercano a tu localidad y proteger la salud de tus pequeños junto con el médico.
