Es frecuente que tras prescribir un tratamiento médico, nuestros pacientes no lo lleven de manera adecuada por diversas condiciones. El apego al tratamiento, es crucial para que, en conjunto, puedan lograr los resultados deseados.
Existe un problema muy grande en la continuidad de la prescripción médica o cambios de recetas de los pacientes, ya que se estima que alrededor del 50% de las personas no toman sus medicamentos de la manera en que el médico la prescribió. Los tratamientos médicos prolongados, como los de hipertensión arterial, diabetes o epilepsia, son los que tienen mayores índices de mal apego y modificaciones por parte de los pacientes.
Para que nuestros pacientes puedan mejorar el apego al tratamiento, es necesario que como médicos entendamos cuáles son las causas por las cuales los pacientes modifican las recetas, dosis o suspenden parcial o completamente el medicamento prescrito.