Automedicación
Hace algunos años resultaba muy sencillo acudir a la farmacia y pedir recomendaciones de medicamentos. Sin embargo, esta práctica no es del todo buena, ya que la mayoría de las veces, el encargado de la farmacia no cuenta con el conocimiento necesario para recetar un medicamento, además de que no conoce del todo tus síntomas o tu historia médica, por lo que podría darte un medicamento no apto para ti.
Remedios caseros
Sabemos que la intención es buena y que, en algunos casos, los remedios como sopas y tés resultan benéficos como complemento al tratamiento médico, sin embargo, no obtener atención médica en el momento necesario, podría hacer que la enfermedad progrese y se complique con el tiempo.
Los cambios en la alimentación
Dejar de comer algunos alimentos por el temor de subir de peso, la creencia de que son malos o que simplemente no nos gustan, puede tener más consecuencias de las que imaginemos. Recuerda que solo un profesional de la salud podrá determinar qué cambios debes hacer en tu alimentación, independientemente de si tu meta es bajar de peso o si es un complemento al tratamiento de enfermedades como hipertensión o diabetes.